domingo, 11 de diciembre de 2011

La conducta del batllismo

“Nuestra democracia contó, pues, con el aporte indeclinable del batllismo que defendió la ley y respetó el derecho (…) Nuestra conducta es siempre clara; defendemos el imperio de la legalidad, de la libertad y las ideas solidaristas que jerarquizan la condición del hombre. Nuestro concepto de democracia nos aleja en igual grado del nazismo, del comunismo, del fascismo, de los dictadores y tiranuelos, de los demagogos e histriones, que gritan en su tinglado, sin poder ofrecer a la consideración del pueblo la paternidad de una idea generosa, la articulación de una ley o un punto de vista razonable y justo sobre los temas que interesan sucesivamente a la opinión pública.


(…) Nosotros seguiremos defendiendo la democracia; señalando a sus enemigos; a los demagogos vacuos y estridentes, a los totalitarios arteros y violentos que hacen también más de un contacto con los primeros. Defenderemos la democracia procurando su constante evolución, trabajando intensamente por ella, con el concurso de los hombres de honrada inspiración, que sin ambiciones personalistas, ni exterioridades llamativas, contribuyen con su esfuerzo al bien común. Esa ha sido y será nuestra conducta”.



"El DÍA", 5 de abril 1949